Si un ser querido sufre una lesión grave o está muy enfermo, es posible que tenga que pasar mucho tiempo en cama.Los largos períodos de inactividad, si bien son beneficiosos para la recuperación, pueden volverse problemáticos si suponen una tensión constante para la piel delicada.
Las úlceras por presión, también conocidas como escaras o escaras, pueden desarrollarse si no se toman medidas preventivas.Las llagas son causadas por una presión prolongada sobre la piel.La presión reduce el flujo sanguíneo al área de la piel, lo que provoca la muerte celular (atrofia) y la destrucción del tejido.Las úlceras por presión ocurren con mayor frecuencia en la piel que cubre las partes óseas del cuerpo, como los tobillos, los talones, las nalgas y el coxis.
Quienes más sufren son aquellos cuyas condiciones físicas no les permiten cambiar de posición.Esto incluye a los ancianos, a las personas que han sufrido un derrame cerebral, a las personas con lesiones de la médula espinal y a las personas paralizadas o discapacitadas físicamente.Para estas y otras personas, las úlceras por decúbito pueden ocurrir tanto en silla de ruedas como en la cama.
Las úlceras por presión se pueden dividir en una de cuatro etapas según su profundidad, gravedad y características físicas.Las úlceras progresivas pueden presentarse como daño al tejido profundo que involucra músculos y huesos expuestos. Una vez que se desarrolla una úlcera por presión, puede ser difícil de tratar.Comprender las distintas etapas puede ayudar a determinar el mejor curso de acción.
El Grupo Asesor Estadounidense sobre Úlceras por Presión clasifica las úlceras por presión en cuatro etapas, según el grado de daño tisular o la profundidad de la úlcera.Los niveles organizacionales se pueden dividir en:
I.
Las úlceras en etapa I se caracterizan por enrojecimiento en la superficie de la piel intacta que no se vuelve blanca cuando se presiona.La piel puede estar cálida al tacto y parecer más firme o más suave que la piel circundante.Las personas con tonos de piel más oscuros pueden experimentar una decoloración notable.
El edema (hinchazón del tejido) y la induración (endurecimiento del tejido) pueden ser signos de una úlcera por presión en etapa 1.Una úlcera por presión de primera etapa puede progresar a una segunda etapa si no se alivia la presión.
Con un diagnóstico y tratamiento oportunos, las úlceras por presión en la primera etapa generalmente se resuelven en tres o cuatro días.
II.
Una úlcera en etapa 2 se diagnostica cuando la piel intacta se abre repentinamente, exponiendo la epidermis y, a veces, la dermis.Las lesiones son superficiales y a menudo se parecen a abrasiones, ampollas reventadas o hoyos poco profundos en la piel.Las úlceras por decúbito en etapa 2 suelen ser rojas y cálidas al tacto.También puede haber un líquido transparente en la piel dañada.
Para evitar la progresión a la tercera etapa, se debe hacer todo lo posible para cerrar las úlceras y cambiar de posición con frecuencia.
Con el tratamiento adecuado, las escaras en etapa II pueden curarse de cuatro días a tres semanas.
III.
Las úlceras en estadio III se caracterizan por lesiones que se extienden hasta la dermis y comienzan a afectar el tejido subcutáneo (también conocido como hipodermis).En ese momento, se ha formado un pequeño cráter en la lesión.La grasa puede comenzar a aparecer en las llagas abiertas, pero no en los músculos, tendones o huesos.En algunos casos, puede aparecer pus y un olor desagradable.
Este tipo de úlcera deja al cuerpo vulnerable a las infecciones, incluidos signos de mal olor, pus, enrojecimiento y secreción descolorida.Esto puede provocar complicaciones graves, como osteomielitis (infección de los huesos) y sepsis (causada por una infección en la sangre).
Con un tratamiento agresivo y constante, una úlcera por presión en etapa III puede resolverse en un plazo de uno a cuatro meses, según su tamaño y profundidad.
IV.
Las úlceras por presión en etapa IV ocurren cuando el tejido subcutáneo y la fascia subyacente están dañados, exponiendo músculos y huesos.Este es el tipo de úlcera por presión más grave y el más difícil de tratar, con un alto riesgo de infección.Puede producirse daño a tejidos más profundos, tendones, nervios y articulaciones, a menudo con abundante pus y secreción.
Las úlceras por presión en estadio IV requieren un tratamiento agresivo para evitar infecciones sistémicas y otras complicaciones potencialmente mortales.Según un estudio de 2014 publicado en la revista Advances in Nursing, los adultos mayores con úlceras por presión en etapa 4 pueden tener una tasa de mortalidad de hasta el 60 por ciento en un año.
Incluso con un tratamiento eficaz en un centro de enfermería, las úlceras por presión en etapa 4 pueden tardar de dos a seis meses (o más) en sanar.
Si la úlcera es profunda y está alojada en tejidos superpuestos, es posible que su proveedor de atención médica no pueda determinar con precisión su estadio.Este tipo de úlcera se considera no estadificada y puede requerir un desbridamiento extenso para eliminar el tejido necrótico antes de que se pueda establecer una etapa.
Algunas úlceras por decúbito pueden parecer a primera vista en etapa 1 o 2, pero los tejidos subyacentes pueden estar más dañados.En este caso, la úlcera se puede clasificar como sospecha de lesión del tejido profundo (SDTI) en etapa 1. En un examen más detenido, a veces se encuentra SDTI en etapa 1.Úlceras por presión III o IV.
Si su ser querido está hospitalizado e inmóvil, debe estar atento para reconocer y, preferiblemente, prevenir las úlceras por presión.Un profesional de la salud o un fisioterapeuta puede trabajar con usted y su equipo de atención para asegurarse de que se sigan las siguientes precauciones:
Llame a su médico si nota dolor, enrojecimiento, fiebre o cualquier otro cambio en la piel que dure más de unos pocos días.Cuanto antes se traten las úlceras por presión, mejor.
Diseño ergonómico para reducir la presión y evitar escaras.
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Hora de publicación: 28 de abril de 2023